sábado, 28 de octubre de 2017

Manzana se olvidó de membrillo:

Los 2 escritos de manzana y membrillo previos a éste diálogo:
 http://titaniaxxi.blogspot.com/2016/10/pensa-pensa-tenes-que-pensar.html 
http://titaniaxxi.blogspot.com/2016/10/pienso-que-ha-leido-membrillo-y-manzana.html 

Manzana: luché para olvidarme de ti fue hace un año, tuve que hacerlo para no autodestruirme.
Membrillo: autodestruirte?  El amor destruye?
Manzana: el amor no correspondido ciertamente lo hace. Pero hoy te vuelvo a topar por mi sendero profesional.
Membrillo: sendero de árboles frutales, sendero de la vida, la vida es un sendero, camino finito para algunos, pero aquí estamos tu y yo, en el camino en búsqueda de la sabiduría.
Manzana: sabiduría?  Querrás decir inteligencia!
Membrillo: ambas, piensas que no van juntas?
Manzana: van abrazadas, pero permiteme una acotación.
Membrillo: dilo mi bella manzana.
Manzana: la inteligencia es la acumulación de conocimiento, la capacidad para resolver problemas, la percepción, la memoria.
Membrillo: y la sabiduría qué es para ti entonces?
Manzana: es el conocimiento que se obtiene tras las experiencias, el discernimiento del bien y del mal, el sentido común, la reflexión y el análisis.
Membrillo: estoy de acuerdo, entonces se complementan.
Manzana: así es, pero si tu tuvieras que elegir una, cuál elegirías?
Membrillo: la inteligencia supongo, y tu?
Manzana: la sabiduría y creo que cada uno de nosotros eligió la que cree más importante.
Membrillo: y  por qué es más importante para ti la sabiduría?
Manzana: porque me llama a la reflexión diaria, mis ojos recorren mi alma, mi pensamiento y el silencio de mi ser, veo en la quietud de mi ser al creador, al sublime conduciendo mi accionar, mi conciencia haciendo pequeños tic tocs en la puerta de mi motor de vida, mis dos circuitos eléctricos siendo dirigidos hacia el sendero cierto. Dime estimado hombre brillante por qué has elegido la inteligencia?
Membrillo: has de percibirlo tú!
Manzana: imagino que es por tu amor a la lectura, a la enseñanza, a descubrir lo nuevo, a la exploración, al ejercicio constante de la memoria, amas impartir conocimiento, ese escalón de superioridad, uds. educandos siempre oxigenando el box de cristal. Tu lugar favorito es ese gimnasio.
Membrillo: el gimnasio, músculos y tendones marcados, siempre lo externo, siempre la apariencia, pero mi caso no es de musculatura fisica, a eso te refieres?
Manzana: ejército de cables, ejercitándose. No eres un árbol de pino, pero tus hojas frondosas vas esparciendo por el aula magna. Magna es la altitud de tu sapiencia. Pero he luchado y ya no te anhelo, sólo admiro a seres como tú. 
Membrillo: tienes seguridad que tu sentimiento ha finalizado?
Manzana: así es, ya no ocupas mis pensamientos diarios, pero me complace observarte y oírte, como todos aquellos que estimo.
Membrillo: puedo preguntar muchas veces, y todas tus respuestas serán las mismas.
Manzana: a qué te refieres?
Membrillo: tú lo sabes, éstas letras tuyas, mientras escuchas música clásica.
Manzana: qué tienen mis letras?
Membrillo: ocupan parte de tu ser, expresan tu anhelo, me elegiste nuevamente tras un año,  por qué?
Manzana: porque has vuelto a ser disertante una vez a la semana.
Membrillo: sólo por eso?
Manzana: sinceramente, más que eso, inmortalizar al ser admirado me complace. Me llena, tú quizás nunca leíste el debate nuestro el diálogo de membrillo y manzana, nunca te lo di a conocer, como tampoco leerás éste diálogo retórico tampoco. Solo si yo decido comunicártelo, pero no lo haré.
Membrillo: tu padre cómo era?
Manzana: brillante de genio,  inventor nato, su vida personal caótica, inteligente pero no diré sabio. Parecido a ti.
Membrillo: has amado alguien así?
Manzana: hace muchos años lo hice. Tanta inteligencia pero tanta soberbia suya me atravesó como una espada por haberlo seguido. Casi me llevó a mi propia muerte, adoraba oírlo, pero sus palabras sobrantes aniquilaban. 
Membrillo: y lo dejaste supongo?
Manzana: no pude, el me dejó 2 veces y aún una tercera para siempre.
Membrillo: tu vida prosiguió como siempre?
Manzana: no, aprendí a no amar al super hombre de Nietzsche, decidí elegir hombres lindos de espíritu y sabios de mente, pero aún persisto en admirar los super hombres.
Membrillo: eres feliz así?
Manzana: lo soy, el mejor cuidado es el de mi oído y hoy tengo a mi lado una persona que me endulza el alma. Admiro su voz suave, sus elogios, sus canciones, su caballerosidad.
Membrillo: y su inteligencia, o sólo es sabio, o hubieras preferido alguien inteligente como tu padre...?