martes, 28 de octubre de 2014

La vengadora :


La vengadora (pensando en desquitarse). Tengo que averiguar donde trabaja el ex marido de Esmeralda trágica. Ahora va ver por haberme alejado a mi hijo.

(La noticia a través de mensajes de celular.)

Sebastián: Hola Esmeralda debo preguntarte dos cosas. La primera es si tenes novedades del divorcio.

Esmeralda:  No, quizás haya dentro de poco. Te estás por casar?

Sebastián: No.

Esmeralda: Y la segunda?

Sebastián: Es respecto a tu suegra.Hoy me vino a ver a mi trabajo.

Esmeralda: Que sucedió, qué te dijo?

Sebastián: Un montón de pavadas.

Esmeralda: Te puedo llamar ahora? O estás trabajando ?

Sebastián: Dale llámame.

Esmeralda: Hola, podes hablar ?

Sebastián: Ya salí del trabajo de la mañana, ahora vine a otro.

Esmeralda: Hasta qué hora trabajas?

Sebastián Hasta las 3 pm.

Esmeralda: Bien. Bueno decime cómo fue el episodio ?

Sebastián: La recepcionista me avisó que había una señora que preguntaba por mi y quería hablar conmigo.

Esmeralda: Está loca la mamá de Bienaventurado. Te habló ahí en Recepción ?

Sebastián:  No, fuimos hasta el portón y ahí empezó a decir un montón de críticas hacia vos. Me preguntó si era verdad que te estabas divorciado, si tenías un tumor en el cerebro ? Tenes un tumor?

Esmeralda: Un quiste, ningún tumor. Ella siempre exagera o inventa.

Sebastián: Me imaginaba.

Esmeralda: No le hagas caso. Que mal momento te habrá hecho pasar?

Sebastián: Le dije que no sabía si tenías un tumor pero que siempre tuviste migrañas. Entonces se llenó de ira y empezó a decir que eras una mentirosa.

Esmeralda: No lo puedo creer.

Sebastián: También me dijo que su hijo estaba sin plata y con el auto sin arreglar hacía meses y que el auto era de ella.

Esmeralda: La mentirosa es ella entonces, porque el auto es del hijo, ella sólo sacó el préstamo a su nombre, pero quien paga todos los meses el préstamo es el hijo.

Sebastián: No sé, lo que sí sé, es que vino a quejarse conmigo a mi trabajo, yo diría una desubicada.

Esmeralda: Totalmente. Algo más te dijo?

Sebastián: Está medio mundo enterado de esto, ya que fue hablar con el pastor de la iglesia que ella va para quejarse de vos y con la gente de ahí.

Esmeralda: Hasta dónde llegó? No lo puedo creer. Qué más te dijo?

Sebastián: Que su hijo no le atendía el teléfono porque vos no lo dejabas. Hasta que me agotó y le dije:" su hijo cuantos años tiene?" Dijo "37" A lo que agregué que ya era bastante grande para que ella lo viniera a defender.

Esmeralda: Obvio. Sucede que entre ellos dos siempre hubo una relación muy pegadiza y ahora que el hijo vive conmigo y no está todos los días con ella, enloqueció. Había una simbiosis entre ellos me lo dijo la psicóloga.

Sebastián: Si, pero que no venga a quejarse conmigo, de hecho mi jefe preguntó donde estaba yo y un compañero le dijo que había venido a verme una representante de una prepaga, me cubrió, cuando en realidad estaba tolerando las críticas de ésta señora.

Esmeralda: Tenes razón. De paso vos seguís yendo a la psicóloga?

Sebastián: Sí, cada 15 días.
Las facturas de servicios que me tenes que dar arreglamos para algún día. El auto lo vendí hace 2 años, así que el impuesto del auto que llega a mi nombre no te preocupes.

Esmeralda: Bueno. Lamento el mal momento que te hizo pasar esa señora. Esta transtornada.

Sebastián: Bueno cualquier cosa nos volvemos a hablar.

Esmeralda: Dale, beso.

Sebastián: Chau.

lunes, 27 de octubre de 2014

El ángel


Melocotón: Cuan dulces son tus labios, adoro estar contigo. Amo tu piel. Eres preciosa y tu cara, es como un ángel.

Esmeralda: Ya no soy más monstruo ? No te causa horror mi conducta sanguínea?

Melocotón: No lo sé, he de precisar conocerte mejor a cada instante.

Esmeralda: Mi sed de ti, se ha agotado hace 5 días. Desde que de tu boca melosa salieron esas horripilantes palabras.

Melocotón: Debieras perdonar mi insolencia, te lo ruego.

Esmeralda: Desde luego, pero quedó anotado en mi alcancía mental.
El oído, mi deleite es el oído, recuérdalo.

Melocotón: Debí haberlo sabido antes y no hubiera atormentado tus oídos.

Esmeralda: Nunca jamás quiero volver a oír esas comparaciones horrorosas.

Melocotón: No lo harás. Podría jurar si así lo deseas. Sólo te pido algo.

Esmeralda: Qué es ése algo?

Melocotón: Sé pacífica junto a mi y serás por siempre mi ángel.

Esmeralda: Procuraré eso, de cierto lo haré.

Melocotón: Mi cuerpo tiembla al abrazarte. Escalofríos me recorren. Y mi pecho arde por ti. Cuando me volverás a amar de nuevo ?

Esmeralda: Cuando sientas mi elevado precio. Y procures pagarlo.

Melocotón: Tu ausencia corporal debilita mi alma.

Esmeralda: Debieras aprender a amar sin poseer entonces.

Melocotón: Pues ésta es mi sentencia ?

Esmeralda: Breve quizás, o perpetua, no lo sé. Pero la llama por ti se encuentra apagada.

Melocotón: Cómo la encenderé ?
Cómo volverá a arder?

Esmeralda: Cuando vengan las tormentas y el recio viento, serán probadas tus palabras de amor y permanencia.

Melocotón: O bendita tormenta, apresurate y llega a mi.
O bendito viento no temo tu frialdad.
Esmeralda: El leviatán nunca más saldrá al exterior te lo prometo, ese monstruo que dijiste que yo era nunca más volverá a querer comerte o herirte.

Melocotón: Quiero tu ser angelical. Pero también imploro tu perdón.

Esmeralda: Ya lo tienes, pero el tiempo borrará tu ofensa y el amor volverá con las pruebas de la vida.

Melocotón: Seré paciente entonces. Y ésta vez seré benigno como tú mereces. Te amo mi ángel.

jueves, 23 de octubre de 2014

El monstruo :


Bienaventurado: Te has convertido en un monstruo!

Trágica: Te refieres a mí?

Bienaventurado: Por supuesto.

Trágica: Qué te he hecho?

Bienaventurado: Todo lo que yo no me esperaba.

Trágica: Calla ya. Me disgusta esa palabra. Por qué continuas junto a mi entonces?

Bienaventurado: Porque yo también hice cosas inapropiadas y tu seguiste conmigo.

Trágica: Claramente.

Bienaventurado: Sigo contigo porque espero que cambies. Porque yo cambié, es así ?

Trágica: Así fue. Pero yo no me casaría con alguien que pienso que es un monstruo. De hecho por haberme dicho que me abandonarías si yo tuviera un hijo contigo por accidente o intencionalmente sin estar casada antes, también pienso que eres una mala persona. Una especie de monstruo.

Bienaventurado: Tengo principios religiosos. Y nadie me los va a cambiar.

Trágica: Prefiero alguien no tan religioso entonces, pero que sepa lo que es amar de verdad.
Dios es amor y alguien que dice creer en el, no abandonaría a su mujer y a su propio hijo.

Bienaventurado: Esa es tu opinión.

Trágica: Y la de muchos.

Bienaventurado: Debo decirte tus errores para que los modifiques.

Trágica: Pero sin agredir demasiado. Monstruo yo ?
Soy un monstruo!  Que lástima, pero dejaré de serlo y me amarás entonces ?

Bienaventurado: Sólo si cambias lo haré.

Trágica: Deberías amar con todos los defectos y priorizar las virtudes.

martes, 21 de octubre de 2014

La batalla 2

LA BATALLA 1: http://titaniaxxi.blogspot.com.ar/2014/08/la-batalla.html

LA BATALLA 2

Dinamita: He hablado ya, discutido hasta lo extremo con ella.
Serena: Y cómo reaccionó ?
Dinamita: No reconoció nada.
Serena:Te sirvió de alguna manera ?
Dinamita: Me sentí libre del peso de la bronca.
Serena: Aún albergas rencor?
Dinamita: Desafortunadamente un vestigio queda.
Serena: Y ella alberga odio hacia ti ?
Dinamita: Me detesta según se lo ha expresado a otra persona.
Serena: Y ahora más ?
Dinamita: Supongo que sí.
Serena: Su hijo que dice ?
Dinamita: Aceptó que me expresara sin pudor.
Serena: Es neutral ?
Dinamita: Lo es hasta ahora, del futuro nadie sabe. Espero me priorice.
Serena: Entre tu y ella hay distancia o más cercanía?
Dinamita: Haber expuesto mi bronca, generó el sentimiento de libertad, pero no lo solucionó, al contrario aumentó la distancia.
Serena: Y qué harás ahora ?
Dinamita: Debo hacer un llamado a la paz, no sé si perpetua, pero aunque sea momentánea.
Serena: Entonces ve y procede.
Dinamita: Multitud de bronca enferma el alma de las personas, hasta el homicidio.
Serena: Quisiste matar ?
Dinamita: No de ningún modo, sólo me imaginé la vida sin ella un tiempo.
Serena: Que desastre natural!
Dinamita: También en un período de ira, lastimé a quien más quiero. Me doy cuenta que estoy lejos de la virtud. No soy digna de ser amada.
Serena: Sólo un Ser superior es digno de amar a quien no merece ser amado. Piénsalo.
Dinamita: Quiero su perdón y su amor en mí y así poder amar al enemigo y no lastimar tanto.
Serena: Ve, purifica tu alma.
Dinamita: Así lo haré a partir de hoy.